Proyecto de Ordenanza
Proyecto de Ordenanza de Modificación de la Ordenanza Nº12.031 que crea el sistema de presupuesto participativo en el distrito de Bahía Blanca.-
Expediente: HCD-184/2013
Autor: Rafael Morini
Bloque: Frente para la Victoria P.J.
Proyecto de Ordenanza de Modificación de la Ordenanza Nº12.031 que crea el sistema de presupuesto participativo en el distrito de Bahía Blanca.-
AUTOR: Rafael Morini.-
PROYECTO DE ORDENANZA
VISTO:
La ordenanza municipal N° 12.031 que crea en el ámbito de la ciudad de Bahía Blanca el sistema de presupuesto participativo.-
CONSIDERANDO:
Que durante las últimas décadas, junto con el ascenso de la posmodernidad y la generalización, la caída de sistemas políticos y económicos, la pérdida de importancia del Estado- Nación y el auge de los espacios locales, se han sufrido, también, modificaciones en torno a la epistemología que sirvió de sustento para el proyecto científico de la modernidad: el positivismo. Con el surgimiento de nuevos paradigmas, como el construccionismo, se cambia la óptica desde la cual pueden ser observados los fenómenos sociales.-
Que esta nueva vertiente científica, sistémica y compleja, encierra propuestas de conocimiento, entendido siempre, no como una representación de una realidad ontológica, sino como una construcción. Y en tal sentido, se resalta la importancia del lenguaje como medio de expresión de esas construcciones. “Todo nuestro conocimiento del mundo (…) supone construcciones, es decir conjuntos de abstracciones, generalizaciones, formalizaciones e idealizaciones propias del nivel respectivo de organización del pensamiento”.-
Que el Construccionismo privilegia como forma de construcción del mundo, el intercambio social, la trama de nuestro sistema de acciones. El sujeto individual queda disuelto en estructuras lingüísticas y en conjuntos relacionales. “Las prácticas posibilitan la red simbólica que se construye de manera relacional e intersubjetiva creando un contexto en el que los discursos y sus significados, se posibilitan más allá de la mente individual constituyéndose en inagotables intercambios sociales”.-
Que la reflexión teórica – epistemológica que a continuación se presenta tiene por objeto el análisis de la participación ciudadana concebida como construcción social, es decir, como producto de la interacción entre ciudadanos de una comunidad, como fruto de imaginarios y representaciones sociales que se ponen en juego, reafirmando y construyendo identidades a partir de procesos subjetivos inherentes a la praxis política. En este sentido, lo que se propone es un análisis del aspecto subjetivo que es constitutivo de la ciudadanía y por tanto de los procesos de participación ciudadana que ella supone, así como el rol que juegan los imaginarios sociales y urbanos en la constitución de roles.-
Que luego de varias décadas de apatía, profundizadas por el aislamiento que produjeron las reformas neoliberales, el individuo parece empezar a reconocerse nuevamente en el rol de ciudadano. En un ciudadano, cuyo imaginario ya no sólo se basa en la emisión de votos cada dos años para la renovación de autoridades que promueve la democracia representativa, sino en un ciudadano más activo, con ciertos niveles de involucramiento con la cosa pública, sobre todo, en momentos de conflicto, de cuestionamiento de las instituciones. Si bien es cierto que durante décadas se vivenció un progresivo deterioro de las significaciones imaginarias sociales, luego de la crisis de 2001, las categorías de ciudadano, vecino, asamblea, participación comenzaron a tener un nuevo lugar en el imaginario social.-
Que hoy existe consenso respecto de considerar al municipio, por su escala y cercanía con los ciudadanos, como el espacio adecuado para dirimir políticas y democratizar la gestión pública. Han demostrado más capacidades que otros niveles de gobierno para la innovación social deviniendo en una suerte de “laboratorio de transformaciones políticas y administrativas” que luego son recuperadas a nivel nacional (Fleury, 2005); han ido incorporando, así, nuevos desafíos en el campo del desarrollo local, de la inversión pública, y de la democracia.-
Que el “presupuesto participativo” es un enfoque alternativo a la presupuestación tradicional que promueve la confluencia de la esfera política y la ciudadanía en un proceso de toma de decisiones que compromete una parte o porcentaje del presupuesto de un determinado nivel de gobierno. Si bien existen casos de implementación a escala regional, las expresiones más exitosas se observan a nivel municipal-local.
Que una de sus principales virtudes es que es un proceso a-partidario en relación a la participación ciudadana, es decir, que en los senos de gestación de ideas y propuestas y en las sucesivas etapas los individuos no pertenecen ni representan partidos políticos, bloques o grupos de interés. De este modo se evita el cambio de votos por proyectos.-
Que se produce la fiscalización por parte de la población de la distribución de los recursos asignados al Presupuesto Participativo. En este aspecto, la ciudadanía cumple un rol fundamental exigiendo el
cumplimiento de los proyectos seleccionados y en forma, calidad y tiempo. El haber sido parte de la gestación de los proyectos fomenta el sentido de pertenencia, teniendo como resultado la presión sobre la gestión política para que las mismas lleven a cabo las selecciones efectuadas en la instancia de votación.
Que se gesta la apropiación de la población de la utilización y ejercicio de la participación ciudadana. La inserción del individuo en la problemática de su entorno social junto a la gestión de la misma, lo ayuda a sentirse parte y actor principal del Estado en su forma más pura.-
Que se logra incrementar la transparencia en la gestión de los recursos. Las limitaciones de recursos se conocen de antemano, ya sea la cantidad de recursos financieros involucrados en el presupuesto participativo y dentro del mismo para cada uno de las delegaciones en las que se divide la Municipalidad. El conocimiento de las restricciones presupuestarias da una idea de la magnitud de los proyectos a realizar. A su vez, brinda seguridad de que existe un monto que se asignará a la realización de propuestas diseñas por la ciudadanía, no haciendo depender la cantidad de recursos a la voluntad política una vez avanzado el proceso de Presupuesto Participativo.-
Que provoca un mayor conocimiento de las demandas de la población. En este sentido las distintas etapas de presupuesto colaboran exteriorizando las necesidades y opiniones de los vecinos. Ellos son quienes mejor conocen sus problemáticas, facilitando y mejorando la identificación de las necesidades del barrio. A su vez, brinda información acerca de la situación y realidades requeridas por otros vecinos, ya sean del propio barrio u otros pertenecientes al mismo distrito. Además, en la última etapa, la de votación, se puede obtener información sobre las realidades de otros distritos distintos al de pertenencia generando una visión más amplia y holística.
Que el Presupuesto Participativo incorpora el debate y el acuerdo como instrumentos esenciales para definir qué necesita cada barrio para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Es un lugar de encuentro y diálogo para reformular los lazos de representación, legitimar la política y acercar los funcionarios públicos a los vecinos y vecinas.
Que el Presupuesto Participativo tiene como objetivo fortalecer el ejercicio de una ciudadanía activa en todas las etapas del presupuesto, en busca de una mayor y mejor inclusión de la sociedad civil y sus intereses. Se busca contribuir a la calidad del Presupuesto Participativo por medio de un aumento en la calidad de la participación y una mayor eficiencia en el funcionamiento de sus etapas con el fin de potenciar la experiencia de la participación. Se entiende que una mejora en la calidad de la participación, implica una participación consciente e informada en la cual los vecinos entiendan para qué participan, qué es el Presupuesto Participativo y cuáles son los problemas reales del barrio/distrito. En este marco, cada
ciudadano debe tener la posibilidad de contar con datos razonablemente precisos y objetivos para participar, entender para qué participan y qué pueden obtener de dicha participación. Toda información que contribuya al entendimiento y al conocimiento del Presupuesto Participativo, sus logros y alcance optimiza el proceso en general, contribuyendo a su calidad. De este modo, una mayor correspondencia entre los problemas prioritarios para los vecinos y los proyectos finalmente elaborados, permite un aumento de la eficiencia del Presupuesto Participativo para responder a las distintas demandas sociales.
Que los objetivos principales de Presupuesto Participativo son: promover la participación directa de los vecinos y las vecinas en la distribución de recursos públicos; solidificar la relación Estado-Sociedad Civil mediante mecanismos participativos; transparentar el destino de los fondos públicos y las acciones del Estado local; concretar la visión de los vecinos y las vecinas con respecto a su barrio y su vida cotidiana; generar en los ciudadanos una apropiación territorial en base al acuerdo en propuestas de bien común de alcance distrital; sostener el papel del vecino como voz autorizada para diagnosticar y evaluar las prioridades barriales.
Que con el Presupuesto Participativo se forman y conforman propuestas y proyectos inclusivos, donde todos los sectores toman parte en la decisión. Concebimos la participación como un valor y como una política, y en ese marco el Presupuesto Participativo se torna generador de políticas públicas en sí mismo con las siguientes características: Inclusión, porque los vecinos y las vecinas que participan, tanto sea en calidad de ciudadanos individuales o como miembros de organizaciones sociales, imprimen su visión y expresan sus intereses; deliberación, porque a través del diálogo y el entendimiento se generan consensos, y así se mejoran el análisis y las decisiones; equidad, porque se buscan distribuir los bienes públicos de tal forma que sean accesibles a todas las personas de la ciudad; efectividad, porque los objetivos y los recursos necesarios para alcanzarlos se formulan y disponen de acuerdo a las decisiones convenidas participativamente; creatividad, favoreciendo la vinculación entre los diferentes actores e ideas para desarrollar una acción original; transparencia, donde la rendición de cuentas se vuelva fundamental.
Que la participación, así entendida, termina exitosamente por enriquecer y profundizar la democracia representativa, desarrollando una cultura política en los ciudadanos para que ellos mismos puedan ser protagonistas del destino del propio barrio, de la propia ciudad. La participación de los ciudadanos en la deliberación, decisión y control de los recursos del presupuesto municipal se ha convertido en estos últimos años en uno de los mecanismos más novedosos y eficientes para mejorar la gobernabilidad. Al posibilitar el Presupuesto Participativo el encuentro de personas con distintos niveles socio económico, distintas
realidades, distintos intereses y diferentes recursos expresivos, la tarea de los coordinadores de las asambleas barriales cobra real importancia. Deben apuntar a la detección de los verdaderos problemas del barrio y, paralelamente, buscar la ampliación de lazos de solidaridad, comprensión y cooperación entre vecinos.
Que este trabajo se propone participar en la ampliación de las bases de la democracia representativa hacia una democracia participativa en el actual proceso de descentralización político-administrativa del Municipio. Se considera de gran importancia esta nueva cultura cívica que llama a una mayor ciudadanía activa, procurando la generación de valor agregado en instancias revitalizadoras de la democracia participativa como lo es el programa del Presupuesto Participativo. En este aspecto, se buscamos como guía “Fortalecer el ejercicio de una ciudadanía activa en todas las etapas del presupuesto participativo en busca de una mayor y mejor inclusión de la sociedad civil y sus intereses”, ya que ser partes vinculantes en el proceso de generación de políticas públicas que nacen o tienen sus inicios en el debate y la discusión ciudadana y barrial, amplía y enriquece nuestra propia participación. Se busca consolidar un proceso de participación ciudadana generando lazos de solidaridad entre la Sociedad y el Estado, para poder –de cierto modo – fortalecer también la confianza de los vecinos hacia quiénes los representan.
POR TODO LO EXPUESTO EL HONORABLE CONCEJO DELIBERANTE EN USO DE SUS FACULTADES SANCIONA CON FUERZA DE ORDENANZA
Artículo 1: Declárase derogada la ordenanza municipal N° 12.031 que crea el Sistema de Presupuesto Participativo.
Artículo 2: Promúlgase la presente ordenanza de Presupuesto Participativo.
Artículo 3: Establézcase la modalidad de “Presupuesto Participativo” que regirá, a partir de la presente ordenanza, en la Municipalidad de Bahía Blanca.
CAPÍTULO I: DEL CONCEPTO PRESUPUESTO PARTICIPATIVO
Artículo 4: El presupuesto participativo consiste en una forma de gestión de presupuesto, en la cual la
población del Partido de Bahía Blanca, a través del desarrollo de jornadas participativas, debate acerca de las prioridades presupuestarias por áreas temáticas.
CAPÍTULO II: DE LOS OBJETIVOS
Artículo 3: a) Lograr el compromiso de los vecinos para con la ciudad; b) Promover la democracia participativa; c) Aportar un instrumento de control y planificación municipal; d) Mejorar la disposición para cumplir con las normas tributarias; e) Motivar la participación ciudadana en las tareas de gobierno de la ciudad, colaborando en el diagnóstico y priorización de las necesidades para el diseño, ejecución y seguimiento de los proyectos de obras, servicios y políticas sociales; f) Consolidar un espacio institucional de participación donde se garantice y consolide los espacios públicos de integración, participación y gestión asociada entre los vecinos y la Municipalidad de bahía Blanca; g) Responder a las necesidades y aspiraciones de las comunidades barriales en la construcción de una ciudad más justa e igualitaria, en pos de tender a que la municipalidad garantice la libertad, la justicia social y el sistema representativo, republicano, democrático y participativo.
CAPÍTULO III: DEL ÓRGANO DE APLICACIÓN
Artículo 4: El Departamento Ejecutivo, a través de la Secretaría de Gobierno, deberá establecer el mecanismo de implementación del sistema de presupuesto participativo. El mismo se llevara a cabo a través de las nueve (9) Delegaciones Municipales. Así mismo cada Delegación Municipal se dividirá en circunscripciones a criterio del Departamento Ejecutivo, teniendo en consideración el índice de carencia.
Artículo 5: Los vecinos de Bahía Blanca podrán inscribirse y participar del proceso de Presupuesto Participativo en la Delegación Municipal en la que tengan registrado su domicilio real. También pueden participar del mismo las Entidades y Organizaciones sociales que acrediten domicilio legal en el Partido de Bahía Blanca, y en el seno de la Delegación Municipal en donde comprueben el desarrollo de sus trabajos y actividades.
Artículo 6: En el mecanismo que se implemente para la ejecución del presupuesto participativo la proporción de mujeres y varones que lo integren será paritaria, es decir que la representación se conformará con un 50% de mujeres y un 50% de varones.
Artículo 7: Como primera etapa de las jornadas participativas por delegaciones, el Departamento Ejecutivo realizará un informe de ejecución del Presupuesto Municipal en curso. Asimismo informará la asignación presupuestaria prevista para la elaboración del proyecto presupuestario en discusión, que deberá ser igual o mayor en valores porcentuales a lo establecido en el año inmediato anterior.
Artículo 8: Para la distribución de la asignación presupuestaria del Presupuesto Participativo de cada delegación, el Departamento Ejecutivo establecerá un índice de carencia, que deberá confeccionarse con indicadores de salud, educación vivienda, ingresos y género, y cuyo cálculo será actualizado anualmente previo a la distribución de los recursos de cada delegación. Tanto para la elaboración del índice como para la actualización anual, el Departamento Ejecutivo constituirá una comisión conformada por un representante por cada Secretaría del Departamento Ejecutivo, un Consejero y una Consejera del Presupuesto Participativo de cada Delegación e invitará a un representante del Departamento de Economía de la UNS. Una vez elaborado el índice deberá ser elevado al Concejo Deliberante para su aprobación.
Artículo 9: La distribución de recursos asignados al Presupuesto Participativo para cada delegación se realizará de la siguiente manera: el 50% (cincuenta por ciento) en partes iguales para las siete delegaciones municipales, y el otro 50% (cincuenta por ciento) en forma directamente proporcional al grado de marginación urbana que establezca anualmente el cálculo del Índice de Carencia, para el cual se utilizarán datos disponibles en el último censo, Encuesta permanente de Hogares y estadísticas por las dependencias municipales.
CAPÍTULO IV: DE LA REDACCIÓN FINAL DEL PRESUPUESTO
Artículo 10: El Departamento Ejecutivo procederá a la redacción final del anteproyecto del presupuesto para el ejercicio siguiente que será enviado al HCD para su tratamiento y aprobación, en los plazos estipulados en la Ley Orgánica de las Municipalidades.
CAPÍTULO V: De la publicidad del Presupuesto Participativo
Artículo 11: El Departamento Ejecutivo, a través de la Secretaría de Gobierno, deberá publicar y mantener debidamente actualizada en la página web del municipio la siguiente información: a) Los proyectos electos
año a año en cada Delegación Municipal; b) Presupuesto originariamente asignado a cada proyecto; c) Secretaría o repartición municipal responsable de su ejecución; d) El monto finalmente erogado en cada caso; e) Estado de avance de cada proyecto y de no ser posible su ejecución las razones debidamente fundadas que no permiten su ejecución.
Artículo 12: Comuníquese al Departamento Ejecutivo para su cumplimiento.-
Artículo 13: De forma.-