Proyecto de Minuta
Minuta de Comunicación solicitando al Departamento Ejecutivo incluya leyenda de prohibición de estacionar en paradas de abastecimiento
Expediente: HCD-725/2016
Autor: Pablo Rosenfelt
Bloque: PJ – Cumplir
Minuta de Comunicación solicitando al Departamento Ejecutivo incluya leyenda de prohibición de estacionar en paradas de abastecimiento
Autores: Pablo Rosenfelt – Gustavo Mandará
MINUTA DE COMUNICACIÓN
El Honorable Concejo Deliberante solicita al Departamento Ejecutivo que, a través de la secretaría correspondiente, incluya en los carteles indicadores de las Paradas de Abastecimiento, una leyenda que exprese la prohibición de estacionar en esos espacios durante las 24 horas del día.
FUNDAMENTOS
Motiva el presente pedido, la constatación de reiteradas situaciones enojosas protagonizadas por conductores que, al ser sancionados por Inspectores de la Guardia Urbana Municipal por dejar sus vehículos estacionados en estos espacios, hicieron notar que en los letreros no se indicaban los horarios en los cuales se aplica la prohibición, tal como ocurría cuando las “Paradas de Abastecimiento” se instrumentaron a mediados de 2012 y sólo funcionaban en determinados lapsos, siendo lugares de estacionamiento medido y pago durante el resto de una jornada.
De un tiempo a esta parte, se resolvió que las mismas cumplan su función durante las 24 horas del día, pero al no estar expresamente señalado, el detalle se puede prestar a confusiones y conflictos y no estaría de más, para lograr un mejor cometido de estos sitios, que se proceda a informar en forma clara e inequívoca que la reserva para carga y descarga prevista al delimitar estas paradas, rige a lo largo de todo el día.
Dado que en reiteradas ocasiones se ha proclamado que el régimen de multas e infracciones de tránsito tiene un propósito preventivo y no recaudatorio, nunca está de más que se comunique con la mayor precisión posible las normas que deben respetarse y de esta manera se reduzca la conflictividad lógica de toda tarea de control, de la cual, muchas veces, son los propios inspectores quienes se llevan la peor parte, al ser destinatarios de reclamos, insultos y hasta agresiones por parte de personas contrariadas por el hecho de haber recibido una infracción con el consiguiente perjuicio que ello conlleva, tanto desde lo económico como en materia del tiempo que se debe destinar para realizar los trámites que permitan resolverla.