Proyecto de Resolución
Manifestar el repudio del HCD al retorno del FMI a nuestro país.
Expediente: HCD-328/2018
Autor: Carlos Quiroga
Bloque: Unidad Ciudadana – PJ
VISTO
Las declaraciones del Presidente Mauricio Macri anunciando conversaciones con el Fondo Monetario Internacional;
CONSIDERANDO
Que hasta el final de la 2° Guerra Mundial el mercado finaciero internacional no tenía organismos reguladores. Los instituidos a partir de entonces (FMI y Banco Mundial) han operado no como guardianes del equilibro financiero y macroeconómico sino como mandatarios de los países ricos y de los agentes finacieros que pertenecen a estos;
Que desde la década de los ochenta se asiste en el ámbito mundial a un empobrecimiento masivo como resultado de políticas deliberadas conocidas como “neoliberalismo”;
Que la globalización implica una financiarización creciente de la economía de todos los países del planeta, al punto que algunos intelectuales hablan de una “tiranía” de los mercados financieros que reduce enormemente el margen de maniobra de las políticas gubernamentales;
Que la globalización económica fue acompañada por una serie de políticas llevadas a cabo por un número creciente de gobiernos que han seguido la vía iniciada por la administración Ronald Reagan y el gobierno de Margaret Thatcher, acelerando y reduciendo de forma deliberada la posiblidad de intervención de los poderes públicos;
Que los planes de ajustes estructurales solicitados por el FMI constituyen una herramienta para domesticar a los países del Tercer Mundo;
Que los efectos de estas políticas han sido desastrosos y han acelerado en algunos casos crisis sociales dramáticas que han desembocado por ejemplo en el recrudecimiento de conflictos étnicos y religiosos, llegando incluso al estallido de Estados;
Que en la medida en que el poder financiero siga imponiendo sus reales convicciones y los gobiernos no regulen nuevamente el mercado, el combustible de las especulaciones y las crisis seguirá recorriendo libremente el mundo generando nuevas crisis;
Que el Presidente Mauricio Macri habló con Christine Lagarde, Directora Gerente del FMI, para entablar negociaciones para un acuerdo con dicha entidad financiera;
Que frente a los que sostienen que el Fondo Monetario Internacional es diferente frente al de los años ‘90 hay que remarcar que dichos cambios del FMI son meramente discursivos, ya que continúa con las mismas recomendaciones. Si bien es cierto que el FMI creó espacio para la aplicación de políticas alternativas en el corto plazo (en especial cambiarias y fiscales), su visión y recomendaciones reproducen la ortodoxia tradicional;
Que ahora se inicia una negociación entre funcionarios y la aprobación del borrador final depende de la opinión del Directorio, donde Estados Unidos y las potencias conservan poder de decisión, lo que va a implicar una pérdida de soberanía para nuestro país;
Que según los anuncios oficiales Argentina buscaría un acuerdo precautorio, pudiendo adecuarse una Línea de Liquidez Precautoria (PLL) o un Stand-by (SBA), ambas alternativas incluyen fuertes condicionalidades;
Que los acuerdos Stand By Arrangemet son para paliar las necesidades financieras que tiene un país. En general se dan a países de ingresos medios que se sujetan a las políticas del Fondo Monetario Internacional;
Que en este mismo tipo de acuerdo actualmente se encuentran Iraq, Jamaica y Kenya;
Que la menor tasa de estos acuerdos revela mayor injerencia política, cuyas exigencias serán más ajuste fiscal, flexibilización laboral, menos cargas laborales, más impuesto a las ganancias, y más liberalización comercial;
Que el FMI se preocupa por el déficit fiscal, pero también por el externo, por lo que es probable que el FMI crea que no alcanza con las “metas fiscales” para reducir el déficit externo, entrando una variable clave: el tipo de cambio real y por ende, el valor del dólar;
Que en diciembre de 2017 el FMI decía que el tipo de cambio de nuestro país estaba atrasado entre un 10% y un 25%. Esto sale de un cálculo en base al déficit externo que tiene la Argentina, el famoso “déficit de cuenta corriente”;
Que el FMI criticó el supuesto atraso cambiario de nuestro país sosteniendo que la “política monetaria era muy estricta”. Es decir, criticaban las tasas de interés altas que presionaban hacia la apreciación del peso frente al dólar;
Que también el FMI criticó la dureza de las metas de inflación, justamente por lo mismo que antes: implicaban un dólar barato. Todos indicios de que el FMI ve con buenos ojos que el tipo de cambio esté en un nivel más alto;
Que es probable que en las negociaciones también entre la cuestión de la política monetaria y que el FMI se sienta cómodo con un tipo de cambio que flote más y se acomode aún más arriba;
Que es posible que el FMI discuta la política monetaria, e indirectamente, el valor del dólar. A partir de las condiciones fijadas se podrá observar el impacto que tiene en el resto de las variables, especialmente en precios;
Que desde el nacimiento de nuestro país, Argentina ingresó a una saga de endeudamiento y fuga de capitales. Cada vez que el mercado financiero internacional tuvo dinero disponible las clases dominantes no lo destinaron para financiar la capitalización y el crecimiento de la economía, sino para financiar guerras, especulación, burbujas de consumo y fuga de capitales;
Que cada onda de endeudamiento terminó en crisis de todo tipo: de pagos, cambiarias, financieras, productivas y sociales;
Que en cada episodio histórico los funcionarios de los gobiernos, representantes directos o indirectos del poder económico dominante, actuaron con ceguera e imprevisión y en colaboración con los agentes financieros externos que se beneficiaban con el endeudamiento irresponsable de los argentinos;
Que el establishment económico y los economistas ortodoxos siempre han presentado los problemas de endeudamiento como consecuencias de malas prácticas fiscales o cambiarias;
Que la deuda externa es consecuencia de un orden económico y nuestro país ha padecido en carne propia las políticas públicas producto de la lógica neoliberal;
Que ha mediados del 2004 la Oficina de Evaluación Independiente del FMI hizo su propio balance crítico de la actuación del organismo en Argentina durante los años noventa, por haber mantenido el financiamiento a pesar del aumento del déficit fiscal y del crecimiento del endeudamiento;
Que dicho informe cuestiona los préstamos del Banco Mundial en el segundo mandato de Carlos Menem, el “blindaje” realizado durante el gobierno de Fernando De La Rúa; el megacanje y el crédito de 8.000 millones concedidos en agosto de 2001;
Que la auditoría consideró que el FMI debería haber sido más duro y estricto con nuestro país en los años noventa;
Que el actual esquema planteado por la gestión económica de Cambiemos, basado en la desregulación, liberalización, apertura, endeudamiento y fuga de dólares, agrava sensiblemente los cíclicos problemas de restricción externa de la economía argentina, tornándola más dependiente de los dólares financieros y más expuesta a las turbulencias;
Que en los últimos dos años tuvo lugar un importante fenómeno de fuga de capitales, récord de salida de dólares por turismo y compras con tarjeta, el segundo déficit comercial más alto de la historia argentina en 2017 y una creciente retención de la cosecha;
Que el gobierno decida entregar nuevamente a Argentina a los brazos del Fondo Monetario Internacional tiene un doble impacto en el corto plazo: en primer lugar, la eventual entrada de dólares frescos para financiar un modelo insolvente que necesita mantener la estabilidad económica para el periodo electoral de 2019 y, en segundo lugar, la vuelta al Fondo es una señal hacia los grandes capitales especulativos que durante las últimas dos semanas estaban huyendo del mercado local;
Que la contracara del acuerdo tiene también dos impactos sumamente perjudiciales para la economía y soberanía argentina: un mayor endeudamiento externo que complica seriamente las posibilidades de repago del país y las conocidas condicionalidades que nos impondrá el FMI;
Que la historia de la relación con el FMI tiene muchos hitos que reflejan los pedidos de política económica realizados por el organismo. Entre ellos podemos destacar:
– En 1977, la implementación de la reforma financiera con Martínez de Hoz,
– En 1982, la estatización de la deuda,
– En 1986, la implementación del denominado Plan Baker, denominado asi por James Baker Secretario del Tesoro norteamericano, quien propone en la Asamblea General del FMI un programa de asistencia financiera internacional para las Naciones más endeudadas con aportes de los bancos privados,
– En 1989, la puesta en marcha del Brady, también denominado así por Nicholas Brady, que buscó sanear a los bancos comerciales norteamericanos y que las acreencias de América Latina quedaran en manos de los mercados de capitales internacionales. La condicionalidad de privatizar patrimonio público para repagar la deuda y aplicar el Consenso de Washington,
– Desde 1990, el impulso de las privatizaciones de empresas estatales incluyeron ENTEL, Aerolíneas, YPF, SOMISA, Correo Argentino, Obras Sanitarias, Ferrocarriles Argentinos, SECBA, Gas del Estado, entre las más relevantes,
En 1993 y 1994, la reforma laboral flexibilizó la aplicación de la Ley de Contrato de Trabajo y puso el eje en la privatización del sistema previsional (creación de las AFJP) y la reducción de contribuciones patronales,
– Finalmente, el Blindaje por 40 mil millones de dólares y Megacanje impulsados por Domingo Cavallo y Federico Sturzenegger fueron los últimos acuerdos con el FMI que aumentaron sensiblemente la deuda de nuestro país;
Que a la par de la implementación de cada una de las medidas mencionadas fue creciendo el stock de deuda. En el periodo que va desde 1976 a 2001, la deuda pública externa paso de 7,7 mil millones de dólares a 166,27 millones de dólares. En el mismo periodo, la fuga de divisas pasó desde 5,4 mil millones de dólares, acumulando 135,7 mil millones en 2001;
Que el sistema de endeudamiento es un mecanismo de subordinación de los pueblos y de los Estados de la periferia respecto del centro;
Que el mito de una globalización neoliberal favorable al desarrollo humano está hundiéndose bajo los golpes de la realidad. El fracaso de las políticas aplicadas desde hace más de 30 años a nivel mundial está en relación directa con el sistema en su conjunto;
POR TODO ELLO EL HONORABLE CONCEJO DELIBERAN EN USO DE SUS FUNCIONES
RESUELVE:
Artículo 1. Manifestar el absoluto repudio de este Cuerpo al regreso del Fondo Monetario Internacional a nuestro país en lo que implica claramente una pérdida de soberanía ante los acuerdos que intenta obtener el Poder Ejecutivo Nacional para lograr un blindaje financiero.